El aumento de la temperatura global hará que los mosquitos puedan desarrollarse en zonas que cada vez se vuelven más templadas y donde anteriormente solía existir un clima frío en el cual los moscos no pueden sobrevivir o desarrollarse.
Estos mosquitos transmiten el Zika, fiebre amarilla, malaria y chikunguña.
El estudio fue publicado por la revista PLOS Neglected Tropical Diseases.
La población sería expuesta a más mosquitos Aedes aegypti pues esta especie es más resistentes al calor, al contrario, la población de Aedes albopictus se reduciría en el oeste de áfrica y sureste de Asia, pues esta especie no es tan resistente al calor.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de la mitad de la población mundial ya vive en áreas donde alguna especie de mosquito está presente.