En reuniones de trabajo por separado, el secretario de Agricultura, Víctor Villalobos Arámbula, e integrantes de los sistemas Producto Maíz y Cebada, nacional y estatales, convinieron en desarrollar esquemas que fortalezcan la asociatividad entre productores e industria.
En ambos encuentros se plantearon opciones para la creación de empresas arrendadoras de maquinaria y equipo agrícola, con créditos a largo plazo a tasa preferencial por la Banca de Desarrollo.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) impulsa una política integral de fortalecimiento a las cadenas productivas en el sector primario del país, con el fin de orientar programas y esquemas de trabajo para impulsar la producción de granos en zonas marginadas, avanzar en la autosuficiencia alimentaria y atender a pequeños y medianos productores.
Villalobos Arámbula afirmó que la Secretaría a su cargo representa los intereses de los productores agropecuarios y pesqueros del país, por lo que se propone realizar un mejor acompañamiento para la sociedad rural.
En reuniones por separado con los integrantes de los sistemas Producto Maíz y Cebada, nacional y estatales, el titular de la Sader subrayó que se establecerán líneas estratégicas en conjunto para detonar créditos a largo plazo en el fortalecimiento de la infraestructura productiva, esquemas de sustentabilidad, seguros agrícolas y cadenas de valor agregado.
En ambos encuentros, realizados en la Secretaría de Agricultura, el funcionario federal llamó a sumar objetivos para trabajar juntos productores y agroindustria, cuya complementación, en el caso de la cebada, permite a México ubicarse como el principal exportador de cerveza a nivel mundial.
Para fortalecer a las ramas productivas de maíz y frijol, expuso, se tendrán que promover modelos de asociatividad entre productores e industria, en un esquema de beneficio compartido y la creación de empresas arrendadoras de maquinaria y equipos agrícola (centrales de maquinaria), a través de créditos de largo plazo con tasas preferenciales de la Banca de Desarrollo.
Destacó la vinculación de la innovación y la tecnología con los productores, para lo que se prevé un impulso en la participación de instituciones y centros de investigación, como el Instituto de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza) y el Sistema Nacional de Inspección y Certificación de Semillas (SNICS), entre otros.