Los pescadores ribereños manifestaron que no hubo buena pesca, las pangas regresaron, algunas, con 20 kilos y otras de 80 a cien kilogramos.
“Ahora vamos a esperar que mejoren las condiciones climatológicas para no perder días de trabajo, la primera semana de captura es la que marca como será la temporada”, señalaron los hombres del mar.
Leopoldo Zambrano, pescador de El Paredón, subrayó que no fue buen comienzo, por el mal tiempo, “hay marea muerta y si no hay movimiento los camarones están estancados”, apuntó.
“Se requiere una buena temporada, ya que vienen de un mal año y tienen compromisos que pagar, además del financiamiento otorgado por las cooperativas para el equipamiento, esperemos que a partir de este día cambie el clima y se pueda tener buenos resultados”.
“Esperamos que el precio sea rentable, el año pasado les pagaron entre 200 y 220 el kilogramo del camarón de exportación, dependiendo de la talla”.